lunes, 3 de septiembre de 2012
MÁS ALLÁ DEL MURO
"The Dark side of the Rainbow", así se llama el experimento que proclama la creencia de que el disco casi homónimo de los Pink Floyd no es sino una nueva BSO para "El Mago de Oz": un tipo descubrió en 1995 que si sincronizas el inicio del disco a partir del tercer rugido del león de la Metro ambas obras se funden en una sola, con un montón de curiosas coincidencias entre el tiempo de la música y varias de las escenas más importantes que se suceden durante los primeros 42 minutos de ese clásico absoluto del cine.
Bien, esto es algo que descubrí ayer, todavía no he hecho el experimento, pero mis vacaciones se acercan tanto como para casi vislumbrar su anhelada sombra a la vuelta de la esquina y esa será una de las actividades que desarrollaré, a fin de cuentas no tengo dinero para irme a ningún sitio ni creo que de tenerlo fuera a alguno. Lo único que quiero es descansar y ver y oír a cuanta menos gente mejor, algo que quizá también pudiera conseguir en un monasterio de esos donde algunos estresados se encierran durante unos días, pero me temo que si le dijera a mi gente que eso es lo que voy a hacer causaría en ellos más preocupación que si me fuera a Las Vegas, aparte que tampoco debe ser barato, no creo que los monjes admitan a cualquiera y a cualquier precio, así que mejor me quedo en casa, eso algo que entra dentro de lo normal y al menos de esta manera podré estar tranquilo, a mi puta bola, durante unos cuantos días.
Los recuerdos de la infancia, de la más temprana, entran casi dentro de lo soñado de lo lejos que están ya, pero a veces, cuando estás viendo algo, o paseando por una calle y hueles algo que te retrotrae un montón de años atrás sin saber realmente el porqué (quizá la memoria sea una cuestión de olfato, más que de ninguna otra cosa), experimentas sensaciones que bien pudieran denominarse deja-vu, es algo difícil de explicar, pero es como si en ese momento, en ese instante, se te estuviera revelando una verdad, una verdad importante, y no fueras capaz de atraparla. Es solo unos segundos, apenas nada, pero tienes la sensación de que algo decisivo para entender de qué va el rollo de tu vida está delante de tus narices, solo tienes que cogerlo para encontrar respuestas, tal vez la respuesta...pero no tarda mucho en irse dejándote cara de gilipollas, aunque no dura mucho pues enseguida vienen nuevos estímulos a tus sentidos y lo olvidas no sin dejar de tener la sensación de que algo raro ha pasado. Los conspiranoicos de Matrix saben de lo que estoy hablando.
Y es que soy un conspiranoico, lo reconozco, aunque no especialmente de Matrix, de la que creo es una gran idea, incluso genial, en manos de dos papanatas que la destrozan con sus piruetas para palomiteros, esto es algo que sucede en ocasiones: grandes cosas en las manos equivocadas. Dios le da de comer a quien no tiene dientes...sí, creo en ello. Como también creo en que las Pirámides no están ahí para que rebaños de turistas se hagan fotos delante de ellas, ni que los que gobiernan el mundo sean siquiera medio-humanos, ni que nadie pueda ser rico sin dejar de ser un hijo de la gran puta. No, no me lo creo tanto como que las Pirámides las construyeron los extraterrestres, nuestros gobernantes son lagartos sedientos de sangre y los ricos, los de verdad, son mala gente por definición, cosa esta última que es la única de la que puedo dar fe: no conozco a nadie con dinero de quien puedas fiarte.
Creer en algo no significa más que eso, que le das una posibilidad como se la puedas dar al cara o cruz de la moneda, nada más. Es la fe, la convicción de que algo que tus sentidos no pueden asegurarte su realidad lo es, lo que mide el valor de tu creencia. Ya lo dijo Jesucristo, "si vuestra fe fuera del tamaño de un grano de mostaza le diríais a la montaña ven e iría a vosotros", o algo así, pero no puedo perder mi tiempo en buscar la cita exacta, que luego se me van las cosas y se me va el hilo de la cometa, cosa que creo ya está pasándome...
Ah, sí...lo de la Cara Oculta del Arco Iris. Parece ser que la sola idea no les hizo mucha gracia a los Pink Floyd, "es una tontería" vinieron a decir, y bien, puede que lo sea, ¡pero coño!, que no están hablando de que hayáis musicalizado (consciente o inconscientemente) algo como La flor de mi deseo, se trata del Mago de Oz, una de las películas clave de la historia, una verdadera pionera, algo a salvar en un cohete cuando todos nos vayamos a tomar por culo. No sé si es la primera en color o lo fue el truño de Lo que el viento se llevó, mucha gente dice que es coloreada, pocos se preocupan en asegurarse de la verdad siquiera del 5 % de lo que hablan, entonces les envidas y retas a una apuesta, ¿qué te juegas? y se echan atrás si no están demasiado borrachos. Ese color, cuando Dorothy abre la puerta después de su viaje por los cielos, no lo he vuelto a ver nunca, NUNCA, parece irreal, como soñado, es tan puro que te hace dudar del tiempo en el que fue hecho, más o menos como pasa con las Pirámides, ese cuento que nos cuentan es mentira...
Si a mi me dijeran, "bien, Kufisto, de acuerdo, dices que no te crees lo de las Pirámides, dices que nos gobiernan sanguinarios lagartos del espacio exterior, también dices que Amancio Ortega no puede ser una buena persona, e incluso insinúas que algo se esconde tras el color del Mago de Oz...¿te apuestas algo, algo importante?" diría que no, no sé la verdad, solo son sensaciones, y después de todo sobre cosas que no son decisivas para mi, sería de tontos jugarte algo bueno por cosas que no te ponen el plato en la mesa, habría que ser un Quijote, el Quijote, para aguantar el envite, estar tan metido en tu papel, en la verdad de tu fe, que a pesar de todo siguieras adelante y dijeras "SÍ, CREO EN ELLO CON TODAS MIS FUERZAS Y ME JUEGO LO QUE SEA", pero también él perdió, recuperó la cordura, dejó de tener fe en sí mismo y murió como todos sin que la montaña se levantara y fuera a echarse a sus pies...
Pero un poco antes, cuando el bachiller le amenaza, vencido, con matarle si no reconoce la superioridad de su dama sobre Dulcinea, aquel loco, aquel fanático, aquel hombre de fe le responde que "Dulcinea del Toboso es la más hermosa de las mujeres, y no está bien que mi flaqueza desmienta tal verdad. Así que hunde tu lanza y acaba con mi sufrimiento" o algo así, que si no lo hice con Jesús tampoco lo haré con el Quijote, y tampoco creo que le gustara a un cristiano viejo como él.
Pero yo creo, tengo fe ciega, en que si Sansón Carrasco hubiera intentado hundir su lanza en el cuerpo de ese hombre no hubiera podido siquiera hacerle el más mínimo rasguño: la fe de don Quijote era perfecta, pues solo era verdad lo que quería que fuera verdad.
El exceso de creencias y la ausencia de fe hace que este mundo parezca lo que no es.
La Banca, la Gran Banca, aquella para la que el oro no es sino una piedra, aún está esperando a un hombre que tenga la fe suficiente en sí mismo como para salvarnos a todos los demás.
No es planeta para héroes este, no...
Al menos hoy.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Es verdad, un olor puede hacer que una serie de recuerdos que tenías en la papelera de reciclaje de tu cabeza puedan volver a su carpeta de origen. Es fascinante. Y los perfumes son expertos en eso...
ResponderEliminarSiempre me quedaré con las ganas del qué hubiera podido hacer Kubrick con "El Perfume", proyecto que como tantos otros tuvo entre manos. De todas formas no es mala película, y vale la pena aunque solo sea por haber captado a Rachel en el momento más hermoso de su vida.
EliminarPara la Eternidad.
Un saludo