jueves, 2 de mayo de 2013

CAZANDO MI LIEBRE




Tenía hambre, eso era todo, mi estómago no está hecho para desayunos de tías que sueñan con su culo, será por eso que pasan de mi, aunque no te creas que yo las busco mucho, ná, me suda el nabo...Así que pillé un trozo de tortilla de patatas de padre y me lo zampé en 0´2, que ya pasaban las cinco de la tarde sin ná más que fruta y un par de onzas de chocolate en el cuerpo, y me despierto pronto, y hasta hace cuatro días no se me ocurriera un mejor amigo que el pan, que sólo la fruta se libraba de su acompañamiento, y no es que esté gordo, nada de eso, sino que paso demasiado tiempo en la Red leyendo cualquier cosa.

Comílo (sin pan) junto al café de mi amigo el pintor, me animé un tanto con la conversación, lo suficiente como para servirme un buen vaso de vino tinto, que no hay como sentirte inspirao para desear estarlo más, ni te cuento cuando le tiras piedras a los dioses del personal, que Miles andaba tabarreando su jodida trompeta, "este tío acabará por hartarme...", "escúchalo", "estoy hasta los cojones...Es oír algo feo, mirar el Spotify y ver su nombre...menos Kind of Blue. Rica Billie Holiday..." Es el jodido Schonenberg del jazz.

Se fue y llegó mi amiga la enóloga, una cuarentina separada que ríe fuerte por cualquier cosa, algo sospechoso, pero como tampoco quiero casarme con ella no es cosa que me disguste, y más sin escapatoria decente. Me ha pedido un Martin Miller´s con tónica y me ha bastado con oír el nombre para desear uno, que si hay una ginebra que me gusta lo suficiente como para discutir al whisky es esa, "voy a acompañarte..." así que he pillado otra copa de balón, la he llenado de hielo y le he puesto una pequeña rodaja de limón, nada más, que todo es mejor cuanto menos lo tocas, pero viendo que quedaba no más que para un par de copas y no tenía repuesto he mirado por otra, que no tengo remedio, y la querida estaba más o menos igual, por lo que finalmente he optado por cualquiera. Así soy yo.

Y como últimamente estoy en modo meinteresatodaformadevida, como al secretario de Drácula, y un tanto animado por el alcohol que empezaba a correr mis venas, aparte que no había nadie más, he dado en salirme con ella, que no es lo mismo por detrás que por delante, y como sé más de lo que aparento la he dejado hablar, interesándome por su oficio y todo eso, que si bien la conozco desde hace años nunca habíamos estado a solas, o no tanto, y si quieres que alguien hable sólo tienes que preguntarle por lo que le gusta, y eso es todo y no hay más para echar el rato.

A Europa le gusta el vino, a mi también, lástima que no lo tenga a mano, aunque peor sería que lo tuviera, sobretodo para vosotros...Francia, Italia, ¡Alemania!, ¡¡¡Inglaterra!!!

- "No jodas"
- "¡Que sí! ¡que lo chic en Europa es beber vino, no te confundas...! Mira, allí no hay cubatas como aquí, todo es en dosificador, por no hablar de los refrescos de barril...asquerosos. ¡Y qué precios! Ocho o nueve euros por lo que aquí sería un medio, ni hablar...Sin embargo pides tu vino, un buen vino, en una buena copa, la adecuada a cada cual, y casi en cualquier tugurio, Kufisto, te lo aseguro...Tres euros, y alternas de vinos, sino fuera por Europa nos comíamos los mocos..."
- "Sí...yo ya no trabajo por las noches, pero cuando me llegaba un mierder pidiéndome un vino a la una de la mañana, con su Wynona Ryder al lao, no sé...como que me cagaba en su puta madre"
- "¡¡¡JAJAJA!!!... como eres, Kufisto..."
- "Sí..."

Llegó uno de sus colegas y se acabó el tema, no es que fuera gran cosa y yo buscara nada, no...simplemente tenían que trazar las rutas del verano, ferias y todo eso, Uropa y tal, catas y hoteles...

- "¿Y como haces para puntuar los vinos, para que no se mezclen los sabores?" le pregunté hará un mes
- "Un chusquito de pan, de esos que ponen con la ensaladilla rusa y tal..."
- "Ah..."

Volví al vino y recordé que ya era hora de llamar a mi hermano, las seis, barra libre, tres horas hacían desde que la vieja me había llamado para decirme que había encontrado trabajo después de dos años, en lo suyo, mi hermano maestro...quien nos lo dijera cuando dejamos de estudiar sin llegar al COU ni Dios que lo soñó.

Me eché otro, nos vemos poco, menos, tiene dos hijas, de la mayor soy el padrino, ya os escribí...Más vino, que diría Bender...

En la sierra de Jaén, un pueblecito, se ha alegrado al ver que le llamaba, de verdad, como yo, no sé, no me lo esperaba...

- "Un beso, tío..." le he dicho a modo de despedida, era mi hermano, coño, mi hermano...Pero me he dado cuenta que el par de dos que había en la barra han dado un cierto respingo, no sé, como si estuviera despidiéndome de mi novio o algo así; lo bueno ha sido que en esas ya estaba mi amigo el ciego, otro de los protagonistas de estas mis historias, lo conoceréis quienes me leáis desde hace tiempo, y enseguida me ha preguntado con quién hablaba, que no hay como tener una tara para que se te perdone todo, o casi, y así debe ser, supongo, sí...

- "Mi hermano, que ha pillao un trabajo en Jaén..."

Hora era de un whisky con cocacola, mi vaderetro, pero ya faltaba poco para irme, aunque no sin antes fumarme a un bacín, uno de esos que gusta saber de los demás sin que le den motivo para ello, no lo entiendo, un treintañero preguntando cosas de abuelo...¿qué más te da, coño?

Pero estoy social, será este mi trabajo, cada día que pasa estoy más convencido del bien que me hace aunque no llegue a nada, o al menos que lo vea.

Si no fuera por esto hoy hubiera acabado como hace mil años, y mira que al llegar a casa ya estaba en sazón, que viéndome jodío para escribir he decidido merendar bien, tanto que he dejado la sartén al fuego para ir a por una barra del pan que hacía tres semanas no probaba, y mientras iba a por ella he cruzado dos bares, dos de los de aquellos tiempos, y de no ser por esto allí estaría ahora, friéndome el corazón...

Mejor patatas con huevos.

Pero no los míos. 

7 comentarios:

  1. Yo también paso demasiado tiempo en la red... encima para no hacer gran cosa, lo cual no me gusta un pelo. En fin... puta vida.

    Miles Davis... nunca he podido con el jazz. No lo "entiendo". Pero bueno, como digo siempre, esto de la música depende de cada uno, de su momento, y supongo que en mi vida no ha llegado el momento del jazz.

    Tío, te pasas el día bebiendo y "contento" por ello, jaja. Supongo que será como ser electricista y entender de cables o ser dentista y cuidarte la boca, lo lógico.

    Al hablar tanto de vino hoy me has recordado a la peli de "Entre Copas". De hecho, hasta tienes un parecido con el protagonista, que también escribe, aunque no tiene un bar y trata mucho el tema de los vinos y sus viñedos. La he visto un par de veces y extrañamente me gusta. Es de esas pelis que no tiene un argumento en sí, pero tiene algo. No sé si la has visto. Si no, te la recomiendo.

    Creo que es la película completa, que no lo puedo comprobar porque estoy con el móvil:

    http://m.youtube.com/watch?v=8xoL1GNRRoQ

    Un saludo.

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    1. Gracias, amigo, pero hace años que no veo cine, no me interesa, supongo que ya me llevé mi parte, y creo que se le da más valor del que tiene, más aún hoy en día que es pura propaganda, aunque siempre lo fue, pero no como ahora que ya pasa de lo insoportable, que si no lo veo sí leo de refilón algunas cosas...y son para vomitar y lo que viene después.

      Tú lo has dicho, toda música tiene su momento, y yo te puedo decir que me zambullí en él al mismo tiempo que con los Zeppelin, cuando peor estaba, le hacía bien a mi mal, es decir, lo alimentaba, que cuando uno está así no puede estar de otra manera porque no está en su mano, pero al menos ayudaba...Días (y noches) tuve que sólo escuchaba a Billie Holiday y "Stairway to heaven", o "Since i´ve been loving you"...el desamor, el desamor...

      Ya no bebo tanto, gracias a Dios, que sino no hubiera podido con ello.

      Un abrazo.

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    2. Yo tampoco veo ya mucho cine, tampoco el más antiguo. Del moderno estoy totalmente desenchufado por salud mental, así que me quedan las de siempre. La de "Entre Copas" la he recordado por ti, y aunque es modernilla, ya debe tener cerca de diez años.

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  2. Vino!! Siseñor!!
    Mi padre y su familia me enseñaron a apreciarlo. No en plan 'enólogo' (ni tgo memoria para los nombres ni paciencia para aprendérmelos!) sino como nexo de calidez.
    Y no es q beba tanto, pero los agradezco ('apreciar' suena muy pijo) cuando me gusta, y lo bebo en buena compañía o por un buen motivo.
    Tampoco me cuadra lo del vino por las noches. La tarde-noche bueno. La noche, no. Pero como no m gustan los licores nunca sé q tomar. Suelo inclinarme por crema de orujo, q es goloso, o vodka con naranja, si la cosa va en plan destroyer.
    Una tortilla, un vino y pan. Jo! Merendola!! Seguro q tu padre cocina tan bien como tu!!

    Sí, sabes mucho. Haces q hablemos y hablemos y hablemos… :-) peladilla!!!

    Me gusta hablar. Y escuchar. Conversar (q no es lo mismo!). Y callar a dúo dejando q el humo del tabaco decore silencios en complicidad, q no hace falta q sean con contenido verdulón. (O, bueno, en cierta forma…hay silencios q desnudan almas!)

    Besos Kufis! La proxima vez q levante una copa d vino será a tu salud.

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    1. ¡Ay, madrecita, jamás mezcles pastillas con vino! Y ginebra, y whisky, y patatas fritas, y huevos, y pollo, y chocolate, y pan, y un mal puro, y un peor tabaco...Y menos mal que salí a pasear.

      ¡Qué noche, Señor...qué noche!

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  3. Es que, a quien se le ocurre decir, un beso, tio. jajaja
    Me imagino a los tipos esos mirandote fijamente y pensando: este, el kufisto tambien es...
    En fin, mezclar ni vino consigo mismo

    Amigo, te dejo el hilo nuevo por si te apetece volver a pasarte por alli.

    http://unblogmuycule.blogspot.com.es/2013/05/volver-empezar-o-la-maldicion-de-sisifo.html

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