miércoles, 23 de febrero de 2011

UN DESASTRE





- "Abuelo...¿cómo fue la guerra civil?"

Se calló un momento y sin dejar de mirar el televisor me dijo:

- "Un desastre"

Eran mediados de los ochenta, yo tendría unos once años y no recuerdo por qué se lo pregunté. Estábamos de vacaciones estivales, no había colegio, supongo que vería algo por la tele y se me ocurrió preguntárselo. Sentí que no debía preguntar más; mi abuela me echó una mirada y continué cenando aquel tazón de leche con sus correspondientes 30 galletas María; cuando la leche no estaba enriquecida con mil soplapolleces, cuando todas las mañanas el vaquero iba con su furgoneta por el barrio para venderla recién ordeñada, cuando las galletas María sabían a gloria y no a ladrillo.

Algunos días después, una noche que mis abuelos estaban tomando el fresco, él se retiró un poco antes, no se encontraba demasiado bien y subió a acostarse, así que nos quedamos mi hermano, mi abuela y yo. Entonces ella nos contó algunas cosas que no sabíamos del abuelo; creo que el frescor de la madrugada, después de otro día de calor infernal, actuó como narcótico en su cabeza.

Nos contó que el abuelo había luchado en la guerra, que fue hecho prisionero y que cuando los hacinaron en una plaza de toros, como animales, logró sobrevivir sin apenas comer ni beber durante semanas. Nos contó que muchos de sus compañeros murieron por beber agua estancada, de lo desesperados que estaban. Nos contó que a consecuencia de aquello le apareció su úlcera de estómago, con la que tuvo que convivir el resto de sus días, y nos contó, también, que una vez hecho prisionero se dió cuenta de que uno de los que estaban en el otro bando era su hermano. Habían estado pegándose tiros durante días sin saberlo.

Después de hacernos jurar, quizá arrepentida, que nunca se lo diríamos nos fuímos a dormir.


Mi abuelo tenía 18 años cuando estalló la guerra; tres después, y aún dando las gracias por seguir vivo, reabrió la taberna de su padre, se casó y creó una familia.

El negocio (me da la risa emplear esta palabra referida a aquellos años) fue para arriba y consiguió que a su familia, y a las de otros muchos, no le faltara comida, ropa y una cama donde dormir. Mi padre dejó los estudios cuando vió que aquello no era la suyo y se puso a trabajar en lo que ya era un bar.

Cuando mi abuelo notó que su enfermedad no le permitía trabajar se retiró. Acababa de cumplir los 50 y su hijo ya estaba preparado para ponerse al frente de lo que en breve se transformaría en marisquería. Se fue a su casa y no volvió a aparecer por el negocio; era un hombre disciplinado, durante 50 años se alimentó a base de arroz hervido, leche, alguna galleta y algo de fruta. Un hombre sobrio. Así que el resto de su vida lo empleó en pasear, ver fútbol y tenis por la tele, dar de comer a los pájaros y, con el tiempo, cuidar de sus nietos. Recuerdo que en ocasiones lo acompañaba a comprar la fruta, íbamos a un almacén grande donde la tenían extraordinaria; de camino siempre teníamos que pararnos un montón de veces para charlar con cualquiera que se cruzara con nosotros. Todos le conocían, todos le querían y todos querían saber de él, qué hacía, qué tal estaba, como le iba todo...yo no podía entenderlo, tenía a mi abuelo por un hombre muy serio, solitario, un tanto huraño, y no comprendía como era posible que tanta gente lo quisiera. Le hablaban con un respeto...y mi abuelo a todos les sonreía, les preguntaba por la familia, les decía amables palabras, se despedía, y otra vez a caminar y otra vez a parar y otra vez lo mismo...


Años después, con trece o catorce, empezamos a ayudar a nuestro padre durante los veranos. Conocíamos a todos los clientes, nos habían visto crecer y se divertían viendo como nos esforzábamos por hacer las cosas bien. Era bonito.

Yo les echaba una mano en la terraza, mesas fáciles al principio, pero cuando el trompo se líaba y no dábamos abasto atendía lo que fuera, eché los dientes rápido.

A primera hora de la tarde colocaba las mesas, con toda la solanera; después los viejos clientes del bar se sentaban y yo con ellos, a la espera de que llegara la gente.

Hablaban de toros, de fútbol, me preguntaban por mi abuelo, contaban batallitas y la mayor parte del tiempo permanecían en silencio. A veces me sentaba en los barriles que dejábamos en la calle (todavía se podía dejar un barril entero de cerveza sin miedo a que te lo robaran) y observaba como podían estar toda la tarde sin hablar, simplemente fumando caldo de gallina, bebiéndose un café y mirando en derredor. Ahora pienso que sólo hablaban cuando yo estaba delante. ¿De qué vas a hablar cuando ya está dicho y hecho todo?. Es mejor estar acompañado, pero no de capullos que con 80 años todavía tienen que hablar como cotorras para sentir que alguien les hace caso.

Cuando ya está todo dicho no hay nada mejor que el silencio.


De todos aquellos hombres que conocí ninguno me habló de la guerra civil. Lo más que decían era una pena, una calamidad, un DESASTRE.

Ellos, los que de verdad pelearon entonces, no tenían nada que decir porque no había nada que decir. Y menos a un mocoso con una esponja por cabeza a la que cualquier comentario estúpido la habría empapado de odio y rencor sin razón alguna.

Ellos, los que de verdad pelearon entonces, rojos y azules, no tenían nada que decir porque hacía mucho tiempo que se habían perdonado y no querían recordar la época más triste de su vida, la que debería haber sido la mejor, la de su juventud.

Ellos, los que de verdad pelearon entonces, no tenían nada que decir porque tenían la suficiente sabiduría y experiencia como para saber que la mierda no hay que removerla.


Son sus hijos y sus nietos los coprofílicos, quienes hablan y rehablan de todo aquello como si les fuera la vida en ello, como si alguna vez se hubiera podido dar marcha atrás en el tiempo para no cometer errores fatales, como si ellos fueran más listos que sus mayores.

Son sus hijos y sus nietos los coprofílicos, quienes han hecho de este país un eterno ring de boxeo, de pegadores de chichinabo, de estúpidos leídos que no saben nada de nada, de amargados que culpan a la historia del fracaso de sus vidas, de renacuajos de pecera con linaje de tiburón blanco.

Son sus hijos y sus nietos los coprofílicos, quienes corrompen la sociedad entera recordando una y otra vez que hace 70 años, cuando ninguno había nacido, nuestros mayores se liaron a tiros porque unos tipos decidieron que había que matarse entre hermanos, entre amigos, entre compatriotas.



No sé cuando coño dejarán de remover la mierda, cuando uno se aficiona a algo es difícil parar, y más en esta sociedad desquiciada, repleta de abogados y matamolleras, donde aquellos dicen que te resuelven los problemas que tengas con los demás y estos como resolver los que tienes contigo mismo, donde aquellos te obligarán a mentir si es necesario y estos a que le cuentes todo lo que se te pasa por la cabeza para "ayudarte", donde aquellos se forrarán con tu desgracia y estos creerán ser el quinto beatle en comparación con un desgraciado como tú.


Y todo para que aquellos te digan que no tienes ni puta idea de como va el juego y estos que no tienes ni puta idea de lo que es la vida.

Para que aquellos te digan como debes vivir si no quieres meterte en líos y estos te digan como tienes que salir de tus líos.

Para que aquellos te digan que tienes suerte de contar con ellos y estos te digan que lo que de verdad siempre has querido es matar a tu padre y follarte a tu madre.


¿Y qué son nuestros políticos sino unos picapleitos jodemadres?


Sois vosotros, y no nosotros, los que estáis mal jodidos.


Y mal paridos.



Para todos aquellos viejos que me enseñaron a no remover la mierda.



Y para mi abuelo. El hombre más recto que he conocido.



Espero que te hayas enterado de que fuímos Campeones del Mundo.



Sí, abuelo...España es Campeona del Mundo.



A pesar de está maná de hijos de la gran puta.

49 comentarios:

  1. A mi de pequeño me enseñaron que hubo una república idílica, hasta que un dictador muy malo la disolvió y tras una tremenda guerra, nos vimos en tinieblas 40 años. Luego el malo murió, y estos políticos que aun vemos nos trajeron la democracia.

    Tras los años de la idiotez, donde la política no interesa ya que "no sirve para nada", uno empieza a leer, y se da cuenta que no todo era como le dijeron. Nota al instante como aquella versión es utilizada como espantajo por ciertos políticos para autofianzarse mientras lanzan estigmas a otros políticos.

    En todas las familias pintaron bastos en aquella guerra, y también en mi familia se ha llevado una política de silencio, de dejar pasar, de no recordar para no hacer mala sangre y generar nuevos odios.

    Como dices, ahora nos sacuden de nuevo con los viejos espantajos, seguramente para no tener que hablar de los 5 millones de parados, de la SS en casi quiebra, etc.

    Yo no quiero revivir aquellos odios, pero desde luego no voy a permitir que me engañen, como hicieron de pequeño con aquella versión, aquella versión que usaban como latigo justificatorio. No hay que revivir odios, claro que no, pero desde luego no se puede callar ante el cinismo y parcialidad de ciertas posturas.

    Porque querer la conciliación, querer evitar los odios pasados, no es lo mismo que callar ante la mentira; de la misma forma que una cosa es la paz, y otra la indefensión.

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  2. Es posible que las puertas del infierno siempre estén abiertas de par en par. los réprobos son libres de marcharse cuando gusten, pero ello significaría admitir que las puertas estaban abiertas, es decir, que había otra vida fuera. No pueden admitirlo, no porque les complazca su existencia actual, sino porque la vida afuera sería diferente y, si ellos admitieran su existencia, tendrían que conducirla. Lo saben. Saben que son libres de marcharse y saben por qué no lo hacen. Este conocimiento es la llama del infierno.

    W.H. Auden comentando la frase: "El infierno es el ser de la mentira".

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  3. kufisto, empezaba a pensar que ya nada me impresionaría o emocionaría.
    Voy a pegar parte de esto en mi blog, con tu permiso, y enlazarlo todo. A ver si ALGUIEN se entera. A ver si alguien se para a pensar.
    Gracias por... esto.

    Un saludo

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  4. - Ogro,

    la verdad es la que te cuenta quien te quiere. No está en los libros ni en las películas. Y muchas veces, quienes te quieren, saben cuando es el momento para contártela, cuando estás preparado para comprenderla. Por eso, el uso que se hace de todo aquello es vomitivo, espúreo, maligno; porque cuentan su cuento a cualquiera y en cualquier momento.
    La vida es una carrera por etapas.
    No puede recorrerse de un tirón porque reventarás.
    Un saludo, amigo.

    - Anónimo, no he leído a Auden, pero creo que la frase que nos traes tiene bastante sentido. Gracias y un saludo.

    - Carlos, por supuesto que tienes mi permiso.
    Gracias y un saludo, amigo.

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  5. Kufisto,
    me gustó el relato, pero en mi caso, mis abuelos estuvieron en el fregado y uno de ellos si hablaba del tema cuando le preguntabas, y tenía claro quién era el enemigo.
    Al otro no lo conocí, lo mataron.
    Nostálgico post.
    Un saludo.

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  6. Mi abuelo me contaba allá por los 90 sus historias de la guerra, no le gustaba pero como yo le insistía, y como mi curiosidad con 18 años era grande me entusiasmaba escucharle con esa ternura y admiración que un nieto siente por un abuelo. Eran historias terribles, desastrosas, a veces causaban mi estupor, pero con los años he llegado a una conclusión, lo que siempre nos han contado "no era cierto", "no había buenos ni malos", "los dos bandos eran a la vez malos y buenos", ´no merece la pena enumerar las burradas que llegaron a hacer cada bando, si los vivieron aquello no removieron la mierda es mejor no hacerlo nosotros solo generaría más odios inútiles, pero sin entrar en detalle sí es bueno conocerlo, un pueblo que ignora su historia que mira hacia otro lado de sus herrores está condenado a repertirlos, y estos politicastros de pacotilla que tenemos están jugando con fuego, la gente cree que la guerra es lo que te cuentan las pelis del malísimo cine español, que en España se vivía de puta madre hasta que Franco se le ocurrió hacer una guerra para ponerse como dictador. España heredaba una situación caótica del siglo XIX, la cosa estaba mal a princios del XX, y otra cosa la gente era más ignorante e igual de manipulable que ahora.
    Pero sería muy largo contar esa historia, me gustaría rendir un homenaje a mi gran abuelo, que como otros tantos, en ambos bandos sufrieron una guerra en la salieron los odios y envidias de hermanos y acabó todo en sangre, pero una cosa sí sucedió porque los políticos generaron esa guerra y siguen por su propio interés haciéndolo.
    Mi abuelo vio a mujeres torturadas en las checas de Madrid "espíritus herrantes" les llamaba, vio a caciquillos de izquierdas decir "lo mio mio y lo de los demás a repartir", "vio amigos del pueblo apuntarle con pistola", "vio como el bando nacional para parar los asesinatos en Madrid, asesinaba al doble de personas inocentes, decía por un muerto que hacían los rojos en Madrid, morían dos en zona nacional"... en fin una autentica burrada.
    Esos abuelos si que dieron una lección de democracia y saber estar, siguieron conviviendo perdonado a cada uno lo que había pasado y sin dar lecciones de moralidad, eso de que tanto presumen los impresentables de nuestra casta política.
    Pero que anden con cuidado porque yo a mis hijos sí les contaré lo que pasó, que aquí según te pilló la guerra unos eran buenos y otros malos, que como el ser humano ambos bandos eran las dos cosas, lo que termina en convertirlos a los dos en malos, que los que tenemos que dar lecciones de moralidad somos el pueblo y no los políticos, que nos debemos respetar y debatir entre direfentes siempre con respeto, que de una persona que no piensa como tú siempre puedes aprender algo y él de tí, que si podemos dar una patada a estos políticos, que los que son malos son ellos, que no nos manipulen, que están para servirnos y si no nos sirven "puerta".
    Lo dicho va por tí "abu".

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  7. Tuck for Tucker, Kufisto. Ya sé que a tí los premios te parecen una pérdida de tiempo, pero se lo he reenviado a un Cervantes. A ver qué cara pone...

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  8. Después de leerlo entero, sinceramente la realidad actual esta muy bien descrita. La pena es que esos abueletes se están marchando y nos han dejado lo mejor de ellos, el cariño ya la verdad. Eran otros tiempos y eran otros hombres, forjados en la realidad.
    Lo mejor de todo esto, es que no soy yo solo el que piensa lo mismo, de la actualidad, pues que corra todo esto como una mancha de aceite.

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  9. - Gracias a Mentalista, Anónimo 1, Anónimo 2 (espero que no sea Gamoneda; me regalaron un libro suyo y no pasé del tercer verso) y Doramas.

    Un comentario es una llamada de teléfono atendida; al menos para decir que te has equivocado de número.

    (Me tienen frito los banqueros; debo andar al descubierto porque no paran de llamarme con números desconocidos o que no tengo grabados. Que les follen, ya les pagaré cuando pueda. O no)

    Pero me han jodido la siesta.
    Al menos mi llamada sabéis reconocerla.

    Un saludo para todos.

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  10. No sólo no les gustaba hablar de ello sino que si alguna vez lo hacían te explicaban las cosas sin rencor y hablando de reconciliación nacional...lo que tú dices, igualito que sus hijos y nietos que no paran de ciscarse en quien les dió de comer..un asco.

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  11. Otra lectura apasionante, Kufisto.
    Me ha gustado mucho el final. Un gran amigo murió a principios del verano pasado y me acordé mucho de él cuando celebrabamos la victoria en el Mundial, tal y como habíamos hecho con la Eurocopa.
    Lástima que las cosas buenas son apartadas pronto por los "picapiedras jodemadres" para remover la mierda que a todos nos apesta, no sea que todos juntitos nos demos cuenta de lo hideputas que son y los colguemos en la plaza del pueblo.
    Saludos a todos.

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  12. Hola Maribel. La cosa es muy sencilla: no se debe inculcar el odio y el resentimiento en los adolescentes. Eso no tiene perdon. Porque lo que te inculquen en tu infancia marcara el resto de tu vida. Y no es justo volcar tu odio sobre quien mas quieres.

    Hola Herep. Aquella noche me pillo trabajando, como de costumbre. Al final terminamos todos borrachos, un pedo memorable...besos, risas, abrazos...a ultima hora llego un antiguo amigo mio, companiero de colegio, con su silla de ruedas, una maldita enfermedad lo postro en ella hace anios, a el, un chico bueno e inteligente, al poco de comenzar una carrera de las fuertes, de las que solo son capaces de aprobarlas los inteligentes que sean estudiosos...nos liamos a beber, recordando viejos tiempos, ajustando las cuentas con el mas querido suenio de nuestra niniez.

    Lo acpmpanie a su casa, a las tantas de la maniana, haciendo eses por la calle. En su puerta nos abrazamos y echamos una lagrima.

    Aquella noche me acorde de mucha gente.
    Absolutamente memorable.

    Un abrazo para los dos.

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  13. Mi tío cumplió hace unos días 93 años. Al pobre le empieza a fallar la cabeza y el cuerpo. Cualquier día de estos... Uno de sus mejores amigos, de los últimos, falleció antes de la pasada navidad. 99 años.

    Ambos supervivientes de Mauthausen.

    Al leerte, me he acordado de él. Nunca lo escuché hablar de lo que pasó en la guerra. Simplemente, decidió no vivir nunca más en este país de locos.

    Eso sí, lo único que siempre me decía era que no había que permitir que nunca más ocurriera. Que nadie tuviera que vivir lo que él vivió. Con los ojos rebosando de lágrimas.

    Con mis ojos rebosando de lágrimas.

    Anónimo, por cuarta vez, con firma.

    J.

    PD. Nada más propio para la ocasión. Lynyrd Skynyrd. Sweet Home ...

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  14. Tu tio es un hombre cabal, J.

    "Sick again" del Physical Graffiti.

    Un fuerte abrazo, amigo.

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  15. Amigo Kufis, otro sombrerazo.
    Un tío mío trabajó levantando la Cruz de los Caídos. A mí nunca en la vida me ha hablado de aquello, ni de la guerra, ni de lo de después. Vivía tan feliz en La Elipa (sí que flipa), creo recordar que esas casas las levantó el Regimen para toda aquella gente.
    Y ahora, los coprófagos talibanes hablan de volar todo aquello.
    En fin...

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  16. Gracias Pedrito. Bienvenido.

    Hola Caste. Tu lo has dicho, "talibanes del pensamiento y de la moral". El comentario de J es muy revelador.

    Un abrazo, amigo mio.

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  17. Siento llevar la contraria. No son talibanes. Son ignorantes. Por lo menos, los talibanes han leído un libro. Estos, ni siquiera.
    No he viajado mucho en mi vida. Nunca me ha hecho falta. Solo tenía que abrir un libro y empezar a leer.
    Y soy libre. Libre para viajar a donde mi imaginación y un libro me quieran transportar. Ya sea un país exótico o al interior de un corazón herido. A mundos en galaxias lejanas o al bar de Kufisto.
    Por eso temen a Internet. Por eso nos temen. Por ser libres.

    Anónimo, por quinta vez, con firma.

    J.

    PD. The Who. Tommy. I'm free. 1969.

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  18. J.

    A lo mejor. Puede que los talibanes vuela estatuas (cuanto se parecen) hayan oido recitar algunas suras del Coran.
    Pero quiza eso sea peor que nada.

    Ya sabes, en muchas ocasiones es preferible nada a algo.

    Al menos nuestra alegre tropa analfabeta no han llegado a sujetarse los pantalones con dinamita cuando van a comerse una burguer king del tio sam.

    Sin banda sonora. Los cuatro que estamos hacemos como que vemos el futbol.

    Aburrimiento.
    Me dan ganas de emborracharme.
    Saludos.

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  19. Tu abuelo es de la edad de mi padre. Bueno, mi padre cuando estalló la guerra tenía 20 años. Este año ha cumplido 95. Está ya muy viejito. Hasta hace tres años andaba muy ágil, pero de entonces para acá decae por días.

    Valían más que nosotros, sin duda.

    A mi padre también lo aprecia todo el mundo. Todos. Siempre fue muy serio y nunca tuvo enemigos. Tuvo distancia con un vecino, pero se amigaron sin saber por qué hace cosa de doce años.

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  20. Hola Pedro.
    Mi abuelo murió hace años, cuando no le quedaron más cojones que operarse de la úlcera. Le tenía auténtico terror a la sola idea de que lo abrieran. "Ya no es como antes...todo ha avanzado mucho y tal..."
    Nos dijeron que había salido bien.
    Al cuarto día murió.
    Viejo que no sea el Rey que entra a un hospital público, viejo que muere.
    Comprobado.

    Es indudable que la raza degenera, como decía Pepe Isbert en "El Verdugo".
    Nosotros somos peores que nyestros padres y estos peores que los suyos.

    Un abrazo Pedro.

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  21. Enhorabuena,me ha gustado el articulo;como decia un amigo mio y veo que alguien por ahi lo ha dicho no hay que remover la mierda porque sino salpicara a todos lados,cosa que le ha sucedido a este impresentable presidente.La historia se debe aprender para evitar cometer los mismos errores,peros a estos politicos de pacotilla eso no les importa.Por cierto que sepas tanto tú como los que te leen que dentro del PP se ha generado un movimiento llamado partidoydemocraciapp.es,que busca cambiar las bases y la manera de hacer politica.No es conocida por que la estan vetando en todos los medios de comunicación,pero tienen 120 delegaciones en toda españa.Hay que cambiar esta forma de hacer politica.

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  22. Hola uskense, bienvenido.

    Ojalá y las listas fueran abiertas, entonces si estaríamos en una democracia.

    Lo de ahora es una mafiacracia.
    Todos están en el ajo.
    Saludos.

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  23. Hola, Kufisto, sensacional requisitoria la que pones hoy. Ocurre también, en mi opinión, que Unos han hecho del relato amañado y tramposo de la g-civil (buenos buenísimos contra malos peores) el Relato fundacional sobre el que montan su pretendida superioridad moral. Verás ahora cuando estén próximas las urnas como vuelven a darle al raca-racá del doberman de la ultraderecha franquista y tal.
    Pero sí, la mayoría de las generaciones anteriores no querían hablar del asunto, sabedores del inmenso fracaso trágico que fue, y la reconciliación era un deseo de superarlo, que algunos quieren que nunca superemos.
    Un abrazo. saludos blogueros

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  24. Hola Jose.
    Si es que esa asi. Las cosas no son blanco o negro y menos con una guerra por medio.
    Yo de la gente digo lo mismo que el Quijote de los libros: que no hay nadie tan malo que no tenga algo bueno.

    Saludos amigo.

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  25. Among other things, you’ll find that you’re not the first person who was ever confused and frightened and even sickened by human behavior. You’re by no means alone on that score, you’ll be excited and stimulated to know. Many, many men have been just as troubled morally and spiritually as you are right now. Happily, some of them kept records of their troubles. You’ll learn from them—if you want to. Just as someday, if you have something to offer, someone will learn something from you. It’s a beautiful reciprocal arrangement. And it isn’t education. It’s history. It’s poetry. — J.D. Salinger (The Catcher in the Rye)

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  26. Es uno de los libros que me quedan por leer.
    En espaniol, of course.

    Aunque tal vez ya se me haya pasado el arroz para esa historia.

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  27. Joanpi se sorprende de tus ideas cada vez que te lee.

    Viví 28 años de franquismo y tu opinión se asemeja a lo que a mí me contaron personas muy cercanas a la barbarie de aquella Guerra Incivil.

    Sorprende que cuando los mismos que la vivieron o no querían hablar de ella, ahora los nietos dicen que por miedo, cuando familias enteras se hermanaron a traves de las nuevas generaciones que se enamoraban de la hija/o, nieto/a, del contrario. Conozco casos de casados/as con el de una familia con un miembro causante de la muerte de sus familiares, de ambos bandos, con un decreto de amnistía pedido mayoritariamente por los de la memoria historica, con un esplendoroso futuro y unas generaciones que no querían otra cosa que avanzar, haya venido esta plaga, estos nuevos jinetes del apocalipsis, dispuestos a abrir la caja de Pandora.
    Como debo llevarte unos veinticinco años, según la cuenta de tu relato, me tranquiliza que haya jóvenes dispuestos a la cordura.
    Gracias Kufis. Vine a ver a Rachel y me llenas el espíritu con una pequeña lección.

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  28. La guerra civil termino en el 39,el franquismo murio en el 1975 con la muerte de Franco;es ya historia y como historia debemos aprender de ella para no volver a cometer los mismos errores.Para eso sirve la historia.Para aprender a conocer a tus antepasados,pero tambiem para corregir los errores que ellos cometieron y evitar hechos como por ejemplo la guerra civil.Cuando aprendamos esa leccion entonces sera posible vivir en paz y sin rencores.
    Esa famosa cancion de Julio Iglesias de tropece de nuevo en la misma piedra es verdad,el hombre es el unico animal que comete siempre el mismo error y no aprende la leccion.

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  29. Hola Joanpi.

    Cuento lo que me contaron.

    Y me fio mas de todos aquellos hombres que del millon de libros publicados sobre el tema.

    Y viendo tu admiracion por Rachel te recomiendo que veas el video que hice en su honor. Lo encontraras en la entrada homonima del mes pasado.

    Saludos y que lo disfrutes.
    Si no lo has hecho ya.

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  30. Uskense,

    asi debiera ser. Pero si algo nos ha enseniado la Historia es que existe para ser utilizada.

    Creo que todo lo que se escribe es literatura. Y la historia es una hija bastarda de ella.

    Con respecto a lo de tropezar dos veces en la misma piedra...dimelo a mi, que he tropezado ciento y la madre y sigo sin aprender.
    Pero creo que todo sirve para algo. Estos dos ultimos anios de mi vida he descubierto muchas cosas. Y han sido los dos peores.
    Quiza todo sea necesario. ¿para que? No lo se. Pero tengo esa sensacion.

    Un saludo.

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  31. El pasado no puede ser vivido..y es un lastre para el presente....
    del futuro ni hablo...es una perdida de tiempo.
    Antifranquistas sobrevenidos...hablando del 36..?
    curioso...está de moda...y el botellón también..
    Saludos
    Pirón

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  32. Buen comentario, Pirón. Bienvenido.

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  33. Perdonar quisiera rectificar,como llevo poco tiempo no me lo se de memoria,la pagina que dije mas arriba y el nombre del movimiento es erroneo;en realidad se llama:
    http://www.democraciaylibertadpp.es.
    Gracias y un saludo.

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  34. No te parece que con juicios tipo juicios de Nuremberg,hubieran contribuido a no remover tanto la mierda.

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  35. No lo creo Anónimo. No lo veo comparable.

    Gracias y un saludo.

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  36. Muy bueno. Pudiese repetirse más alto pero no más claro.
    Saludos!
    Santi

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  37. Yo también tuve abuelos y abuelas que me hablaron de la guerra civil.

    Y por influjo de ellos, padre y madre que hicieron lo mismo.

    Tras años de confiar en su versión de la guerra (izquierdista), descubrí que no decían la verdad.

    Pero ellos no habían sido intoxicados por los transicionistas. Su pensamiento databa de mucho antes. ¿De cuándo? De la propia guerra. Y sobre todo de la república anterior.

    Fueron engañados los combatientes del Frente Popular antes y durante la guerra. Y así siguieron durante el franquismo. Y de esta manera ellos intoxicaron a sus hijos.

    Luego vinieron los transicionistas, su hijos, e intoxicaron al por mayor a casi todos los españoles.

    Pero la intoxicación tiene sus raíces en una etapa muy anterior. En la República del 31. Nefasto y criminal régimen (régimen: conjunto de agentes públicos hegemónicos. Estatales y civiles; personas dirigiendo públicamente). Criminal, por encima de las formas institucionales, porque esencialmente, las fuerzas principales, es decir los izquierdistas, se dedicaron a sembrar un odio asesino que fue, sin duda alguna, la causa directa de la guerra.

    No, esto no viene de la Transición. Viene de la república del 31. Yo lo sé. Lo comprobé en mi familia.

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  38. No, viene de más lejos, Shumer, viene de cuando las palabras dejaron de ser sagradas.
    Sírvanos unas espumas, Kufisto, por favor, con algo de cerveza.
    Mejor dicho, yo tomaré un fino bien frío, que hace días que no bebo mar.
    Uno pronunciaba las palabras para hacer hueco a los sentimientos, que no tienen otro aliviadero, y a cambio recibía las de otro, para construir con ello un conocimiento milesimal pero creciente.
    Hoy las pronuncian fundamentalmente los televisores, y la mayor parte del tiempo les escuchan los muebles.
    La única manera de reconocerlas es por medio de la lectura: ejercicio solitario donde los haya.
    Con la substitución de lo sagrado por lo político, se fue el sentido de las palabras, y ahora sólo nombran lo que dice la mayoría, lo que es correcto que digan.
    Los viejos saben esto, y se niegan a gastar energías. De vez en cuando, pasado ya un larguísimo rato, uno de ellos dice, al caer la tarde: “Pues ya ha transcurrido otro día”. Y tú puedes contemplar en ese momento a uno de aquellos grandiosos sacerdotes egipcios despidiendo el Sol con el pensamiento ingente de la muerte.

    JMT

    Gracias, Kufis, por su hospitalidad.

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  39. Gracias a vosotros, y perdón por no hacerlo antes, tuve problemas con Blogger

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  40. Franco ASESINÓ -A TRAICIÓN, CONTRA UN ESTADO DEMOCRÁTICO, REPUBLICANO Y LIBRE, DONDE LAS MUJERES PODÍAN VOTAR, LOS POBRES PODÍAN IR A LA ESCUELA...- a decena de miles de personas; ETA a unas ochocientas. Ahora que ETA ha dejado las armas pues hacemos lo mismo, miremos hacia adelante y dejemos de remover la mierda, en este caso también.
    ¿Estás de acuerdo, chica del abuelo recto?
    Violaron y asesinaron a una niña en Huelva (MARILUZ, un nombre para no olvidar, JAMÁS), ahora que se juzgó al individuo, dejémosle libre que ya pasó y no removamos la mierda.
    Total, señoras y señores, ¡aquí no pasa nada!.
    Bueno, mi postura es como tu abuelo, recta: ¡QUIÉN LA HAGA, QUE LA PAGUE!. Y los malos, que sólo figuren en la historia como tales.

    ¿Qué no se entiende de mis palabras?

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  41. Por cierto, con otros se te dará bien escurrir el bulto, y tu tiempo parece que te has llevado para ello, pero conmigo, y muchos más, no tienes nada que hacer. El bulto está ahí, y no lo queremos.

    Un saludo.

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  42. No tenéis remedio, lo lleváis en la sangre.

    Un saludo

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  43. gracias kufisto,nadie podria decir mejor que tu la realidad que tenemos en españa,la remora de la demencia de los españoles nunca nos dejara salir de donde nos hemos metido,posiblemente sea que no merecemos otra cosa.

    un saludo.

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  44. Gran entrada. Tras leerla veo que coincidimos bastante en algunos asuntos.
    Por lo que a mí respecta tuve un abuelo de cada bando. Nunca hubo ningún rencor, ningún reproche, nada. De hecho se llevaban estupendamente.
    Cuando veo ahora cómo algunos (muchos de ellos niñatos con la mitad de mi edad) revuelven la mierda lo que se me revuelve a mí es el estómago.

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    1. Y como tú, la inmensa mayoría. Nos correrían a garrotazos si pudieran vernos. Aunque quizá pueden, pero seguro que les han requisado los garrotes. Una lástima.

      Gracias.

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