lunes, 11 de abril de 2011

BAJO EL AGUA, BAJO LA TIERRA





He despertado temprano, a eso de las siete, anoche me dormí pronto para mis costumbres y con cinco horas de buen sueño tengo más que suficiente.

Ésta ha sido la primera noche sudada del año, he amanecido con la sábana y las mantas tiradas por el suelo, la almohada húmeda, el verano puede ser infernal...pero aún estamos en primavera.

Zumo de naranja con limón, pastilla de Ebastel Forte, un cigarrillo a medio fumar y a la calle.

Iba caminando, corneando disimuladamente un maligno 24 horas y maldiciendo al satánico propietario, cuando he creído ver a mi amigo Enrique en su coche, creo que él también me ha visto, pero como iba con la gorra y las gafas de sol pues no ha habido saludo, ha sido un instante, un rápido encuentro de miradas, un segundo...suficiente, sé donde iba, me lo dijo el viernes por la noche.

Al Hospital, sección oncología, apartado casos perdidos, chute de mierda para mitigar el inhumano dolor y a tu casa, a respirar las últimas bocanadas de aire de tu vida.

Es el colega del que os hablé hace tiempo, ese que le quitaron un tumor en la laringe y ya puestos la laringe entera, le dejaron mudo, bueno, no totalmente, haciendo un gran esfuerzo puede articular algunos sonidos, prácticamente ininteligibles, el pobre se desespera, casi siempre tiene que acabar por coger un jodido bolígrafo y una puñetera servilleta para decirte cualquier cosa...va a morir con 44 años y los tres últimos han sido para mear y no echar gota: le detectan el tumor, se somete a la quimio para no quedarse mudo, parece salir bien, si bien es perder veinte kilos y el pelo, quedarte sin fuerzas, como un pajarillo, aunque aún puedas cantar, pero en una revisión rutinaria le dicen que no, que el bicho está despierto y creciendo, que hay que extirparlo, que te vamos a arrancar la garganta, tronko, eso o al hoyo, tú mismo...le quitan el cuello, durante la convalecencia casi se muere desangrado por una negligencia, sale del hospital, su chica no puede soportar la convivencia con un hombre sin cuello ni erecciones y le abandona por un mastodóntico rumano, él se queda con sus dos hijos pequeños de su primera mujer que no entienden nada de lo que está pasando, cierra el bar, abre otro, ruina, lo cierra, abre el anterior para que los dos hijos mayores tengan donde trabajar y en otra maldita "revisión rutinaria" le detectan un tumor en cada pulmón, sentencia de muerte, últimas preguntas, ninguna respuesta, en brazos de San JB y adiós a la vida que un poco más y me quitan hasta la sombra.

Mientras tanto el sol iluminándolo todo sin una nube a la vista.

Como una broma.

Lo he pensado; tiene que ser triste, pero triste de cojones, saber que te quedan pocos días de vida y que todo sigue su curso, como si no le importara a nadie, como si tu presencia fuera un insulto a la vida, "¡muérete ya, joder!". Destrozado, hecho mierda, sin esperanzas...y una mañana gloriosa, insultantemente divina, azul, brillante, hermosa, los pájaros vuelan y cantan, las mujeres llevan a sus críos llenos de vida al colegio, la ciudad bulle, las prisas, el ajetreo, la acción, el rollo...y tú, con la mirada perdida, en tu coche, a que te droguen para calmar tu dolor, no para que veas las cosas mejor, divertidas, excitantes, no...te drogan para dormirte, anestesiarte, dejarte ko, que no sientas dolor, ni nada, que no sientas nada porque si sientes algo será dolor...un día como hoy, estos últimos días de tu vida, amigo mío, deberían ser grises, lluviosos, fríos, deberían guardar un poco de respeto ante la muerte, pero la Vida es como un niño, inocente, brutal, estúpido y hermoso, es como una gran bola rodando cuesta abajo por la ladera de una enorme montaña, poco a poco se va desgastando, perdiendo guijarros por el roce, pero no se para recogerlos, Enrique, ni aminora su descenso, ni nada...es la Vida y tú ya no estás dentro, te aferras a ella con la uña del dedo meñique, pero es débil y está a punto de romperse, estás a punto de quedarte en el camino y ver como la bola sigue rodando hacia abajo...al menos tendrás el consuelo de saber que tus hijos van en ella.

Caminando junto al río dormido, rodeando la Casa de los Muertos, he visto como el sol se reflejaba en el agua, perfecto, parecía como si hubiera otro sol bajo el agua, redondo, dorado, fuerte, cegador...era el reflejo de la Vida, no era real, pero si mirabas la imagen te hacía casi el mismo daño que el auténtico, casi jurarías que ahí, bajo el agua, nacía otro sol, otra vida, otra oportunidad, otro cuello, otros pulmones, otras mujeres y otros hijos...me lo ha parecido, Enrique, de verdad, ha sido inquietante y esperanzador.


Tal vez, amigo mío, ahora que vas a ir bajo la tierra, encuentres todo lo que te han quitado sobre ella.


Tal vez.


Amigo.

16 comentarios:

  1. Últimamente te está dando la vena existencialista en los relatos, eh!
    Y es raro leer relatos como el tuyo, donde se habla de la muerte y la vida sin azucares u otros edulcorantes, sino dando palos...
    ... con realismo.
    Me ha gustado, Kufisto.

    ResponderEliminar
  2. Pues sí, querido Kufis. Las cosas son tal cual las cuentas.
    La vida sigue para todos los demás. Sigue para todos los que queremos seguir aferrados a ella, a pesar de haberte arrancado de cuajo algo muy valioso. Es lo que hay.
    Pobre Enrique. Qué asco de cáncer.
    Un abrazo amigo.

    ResponderEliminar
  3. Estupenda entrada. Cruda, pero estupenda.

    La vida continua su curso ajena a todo. Como ha sido siempre. La belleza de la primavera, insultante cuando en el interior del alma está helada. Pero siempre ha sido y será así.

    Saludos, Kufisto.

    ResponderEliminar
  4. - Así es, Caste, tú lo sabes bien. Un abrazo.

    - Muchas gracias R. Cada día que pasa más me convenzo de lo humano que es morir en un momento, sin enfermedades ni mierdas, un accidente, un infarto, un tiro...queu no te de tiempo a llorar por tu ida, que no te de tiempo para la envidia ni el rencor...no sé. Tiene que ser muy duro ver un día como hoy y saber que te quedan muy pocos. Otro abrazo para tí.

    ResponderEliminar
  5. Joder tio,
    parece el relato de un suicida.
    asegúrate de no matar a nadie cuando te tires por la ventana.

    ResponderEliminar
  6. Esta es mi ventana.

    Saludos y gracias, Colchón.

    ResponderEliminar
  7. diosss, kufis, no he sido capaz de leer hasta el final

    motivos personales...

    un abrazo,
    mescalero

    ResponderEliminar
  8. Otro para tí, mescalero. Que te vaya bien, amigo.

    ResponderEliminar
  9. En el "Hagakuré", oráculo de samurais, se aconseja lo siguiente: "Debe empezarse cada mañana meditando tranquilamente, pensando en la hora final e imaginándose las diferentes maneras de morir: alcanzado por una flecha, por una bala, atravesado por el sable, ahogado en el agua, saltando en un incendio, atravesado por el rayo, enterrado por un temblor de tierra, cayéndose por un acantilado, víctima de una enfermedad o de muerte súbita. Se debe comenzar el día pensando en la muerte”.

    Yo pienso en la muerte todos los días. Con eso, me voy quitando el miedo. También soy consciente de que, cuando morimos, siempre estamos solos ante la muerte. Aunque haya otro muriéndose a tu lado, cada uno se va por una puerta diferente.

    Lo único que puede mitigar esa terrible sensación de soledad es la fe en Dios, pero yo no creo en Dios.

    En cualquier caso, debería dejar de fumar.

    ResponderEliminar
  10. Extraordinario comentario, Jeremías, de verdad.
    Felicidades.

    Yo también tengo que dejar de fumar, compañero.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  11. a mi padre le detectaron un cancer en las cuerdas vocales en julio, en agosto empezó la radio, 40 secciones de 5 minutos. el cancer ha desaparecido, pero le ha quedado un mal paso de aire, no ha abierto ese paso con corticoides y ha habido que recurrir a una traqueotomía para hacerle la respiración más fácil.
    el se encuentra bién, va mejorando por dias etc...
    para hablar aunque mi padre tenga sus cuerdas vocales, le cuesta mucho porque es mayor, porque ha fumado 70 años de los 80 años que tiene, pero valla con muchísimos esfuerzos y paciencia se le pilla algo.
    mi madre tiene las piernasmuy mal de la circulación causada por la diabetes y puede que peligre una pierna.
    a lo que voy, mi padre está harto de decir que el cambiaba de situación y perdería una pierna antes que el habla.
    os prometo que es muy duro para todos.
    fuertes abrazos a ENRIQUE
    abrazos a todos

    ResponderEliminar
  12. Es jodido, pero sin la capacidad de ignorar, de olvidar, de no sentir demasiada o constante empatía por personas no cercanas, simplemente nos volveríamos locos antes de los 25.

    Sí, es una putada, pero es un sistema de defensa, y es que tenemos una mente muy frágil. U olvidamos, o saltamos por la ventana. Y por desgracia, hay gente que no puede olvidar.

    ResponderEliminar
  13. - Hola Forner. Creo que la hipotética elección de tu padre es natural; él ya es mayor, y a esas edades las piernas no son tan necesarias como el habla. En mi caso, a mis treintaitantos años, sería justo la contraria.

    Gracias, ánimos y suerte, amigo mío.

    - Hola Ogro. Tú lo has dicho; nunca se toman más en serio las cosas como cuando se es tan joven. Únicamente la creencia en que tú no seríass como los mayores nos impedía perder la cabeza y mandarlo todo a la mierda, porque si con esos años te certifican que ese va a ser tu futuro...no habría ventanas suficientes en el mundo. Lo que ocurre es que con el paulatino paso del tiempo lo vas aceptando, no es de un día para otro, eso es lo que le salva a la juventud, que se va sin que tes cuenta.

    No creo que nuestra mente sea débil, más bien al contrario, pero de tanto castigar el cuerpo quien más sufre es la cabeza. Si uno está fuerte, sano y no es estúpido, no hay comecabezas que te líe, todo se ve con claridad. Lo que ocurre es que nosotros mismos nos hacemos gran parte del daño, y como nos debilitamos nos amansamos. Por eso los hijoputas inundan de drogas a nuestra juventud, para tenerla controlada, es tan viejo como el hombre. "Sexo, drogas y rock n´roll" fue escrita por un temeroso nonagenario. Si la juventud quisiera...pero es estúpida. Éramos estúpidos.
    Saludos y gracias.

    ResponderEliminar