viernes, 21 de febrero de 2014
LA CARA VISIBLE DE LA MIERDA LUNA
Soy un ignorante.
Un ignoran, como decíamos cuando éramos chavales, cuando nos reíamos de todos. Pero ya entonces, la primera y última vez que pertenecí a una comunidad, en lo más profundo de mi, sabía que yo mismo era otro de aquellos.
Estaba fumándome un pito en la puerta del bar, tan extrañamente relajado como suele acontecerme desde que cumplí los 40, cuando llegó uno de mis mejores amigos, uno que ha leído poco y sabe mucho.
No habíamos hecho más que saludarnos y vimos aparcar otro coche justo detrás del suyo. De él emergió alguien que nunca me ha gustado, alguien que jamás hubiera podido situar junto a mi amigo; pero también se conocían y se saludaron efusivamente ante mi estupor.
- Hola, Kufisto -me dijo él extendiendo su mano. La cogí y le saludé por su nombre de pila. O por el que le llamábamos en aquellos años. Poco después le pusieron un apodo, algo relacionado con su triunfal paseo entre las púberes féminas, de hecho así le llaman todavía. Al menos los que son sus amigos. Pero yo no.
Tiré el pito y pasé adentro. Poco después pasaron ellos.
Ha publicado un libro, es escritor, aunque sea de los auto-financiados y tal, que no lo sé, puede que hasta le paguen, me da lo mismo. Recuerdo que hizo la presentación en un bareto de Madrid, en uno de los modernos, en uno de los suyos. Él es moderno y escribe sobre cosas modernas: su vida alrededor del mundo (o de España, que de este me fío lo mismo que de mi) y sus múltiples y diversos folleteos a bordo de yates, playas, barras, o encimeras. O algo así entendí en la reseña que publicó el periódico local cuando presentó su obra ante los paisanos en el Centro Cultural.
Siempre supo los tiempos correctos. Como su padre.
Muy educadamente, demasiado, me pidió un café; café al que le incitaron cortar con Baileys los dos amigos que estaban esperándolo, dos parecidos. "Uno por uno es uno y uno por dos, dos"
- No, que antes tengo que atender unos asuntos...
Rieron y yo me quedé loco.
Y mientras se iba yendo (porque esta clase de tipos no es tanto que se vayan como que se recuerdan) tuve la ocasión de conocer sus planes para hoy, como ayer y siempre: comida, bebida y trece. La coca y lo demás se da por sobreentendido.
- Silvia está deseando conocerte.
Rieron mucho más y me acordé de la foto de una que ayer me hizo ganar diez thanks en el Ático de la Burbuja, ese nido de misóginos.
Pero si os digo la verdad no fue eso, sino lo de trece. 13, el último de Black Sabbath que tanto me acompaña.
13.
Trece...
Trece amigouas, barbacoa cuasi-cuarentona, niñas monas, carne, alcohol y cocaína, el Dom Perignon que lo ponga Loquillo y el Chanel...tampoco hay que ser tan delicado: mejor cuanto más basto. Así es que son jóvenes. Rico aroma a chocolatón y vainillaza. Después de todo, lo mejor es lo que viene dentro, ¿no?
Se fue Él y dos minutos más tarde los otros dos: la cosa ya había quedado meridianamente clara.
A veces uno tiene que hablar, es cosa como cuando esas noches no te queda más que Dios, y por esto le comenté a mi amigo que si sabía el último destino de uno de los suyos, un chaval por el estilo del que se acababa de ir pero en su versión trágica, esto es, que ya está medio quedao.
- ¿Sabes donde anda, que me lo dijo su hermano? - le pregunté sabiendo lo que preguntaba.
- No
- ¡En África...! Se ha ido con una ONG a ayudar a los negritos y...
- Ese lo que está es quitándose -me dijo sin levantar la mirada del As
Y entonces, en ese instante, supe que tenía razón: no podía ser otra cosa.
Se va este y llega otro, un carapadre de nacimiento, un buen hombre. Me pide lo de siempre y ya no me acuerdo porqué me explica lo que hay en su trabajo, uno de obras públicas y todo eso...
- Mira, Kufisto...Ahora estamos en Toledo, llevamos unas semanas por allí haciendo unas "bañeras" para la basura...Te puedo jurar por mi hijo que me sobran dedos de una mano para decirte los camiones que la separan: Tó pá dentro.
- Ya...Yo no reciclo una mierda.
- Los ecologistas deberían estar contentos: aquello se llena de gaviotas, ratas, y cigüeñas mientras se va llenando. Hasta que la tapan.
- Ya...
- ¿Y los pisos?
- ¿Qué?
- ¿Conoces a Pedro, mi amigo, el marido de Patricia?
- ¡Ah, sí! (una mujer kufistiana, de las que todavía se quedan algo, muy follable...)
- Ese...El otro día van a colgar un cuadro con un...(palabro técnico; algo poco más que una chincheta) y se cargan la tubería de la calefacción
- ¿Como?
Y me cuenta las calidades de los pisos en plena ebullición de la burbuja; cosas increíbles, cosas para arrancarte los dientes, cosas de ser puta y poner la cama, como le ha pasado a este nuestro común amigo, más suyo que mío, claro.
- España, Kufisto, España...
- España...
- Yo te lo hago por ocho en vez de por dieciséis. Y el otro por por cuatro en vez de ocho...Y así
- Como lo del Canal de Panamá
- ¿Qué?
- Ná, que sí.
- Así funciona el tema, Kufisto.
- Ya.
Me pongo una copa. Ya es la segunda.
Y ahora, mientras acabo esto, ando por la quinta y sus aledaños.
Pero antes de empezar le eché la comida la gato.
Tenía que escribir.
Me voy a andar mis cuarenta años.
Extrañamente tranquilo.
Ignoran forever.
Yo, señora mía, soy así.
Como siempre lo he sido.
Como entonces, cuando le reventé los dientes al mejor amigo del escritor.
Otro figura.
Otro de la cara visible de los ignorans.
Así es la vida.
La mía.
La oculta.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Luis: precisamente ayer le mandé un privado a De Elea pero no me ha contestado, no lo habrá visto o a lo mejor ni sabe que existen. A ver si hay suerte.
ResponderEliminarPedro: sabía que Rallo era de mi edad o por poco porque recuerdo que lo decían a veces en alguna tertulia en la televisión de LD. Es muy inteligente, espero que se deje de tanto "manual" liberal y economicismo se centre un poco. Hasta que no deje de pronunciar la palabra "liberal" en cada frase no lo habrá conseguido.
Yo le echaba por encima de los treinta y cinco. Pero es que ya colgaba artículos hace siete años, o más.
EliminarEs teórico, lo cual quiere decir que sabe de lo que habla, pero no que eso tenga que ver con la realidad que nos envuelve.
A mí me empezó a interesar la economía leyéndole, porque encima explica muy bien. Otra cosa es que coincidas en las soluciones. Y en cuanto al diagnóstico es bueno siempre y cuando no salga del campo teórico. Ahí no dice nada, jamás lo aborda. De ahí que su ideología sea pura formalidad teórica.
Sergio, pues a mí ya me ha contestado. Dice que se va a pasar por aquí.
ResponderEliminarOswald.
¿Moa? Pues no estaría mal. A mí me gustaría que se aparcara la puta política y hablásemos de otras cosas. Pero siempre acabamos en ella. Y yo llevo buena culpa.
EliminarSeguro que tiene cosas interesantes para contar. Ya lo creo.
De Elea, coño, que pareces lo que no eres.
EliminarTienes mitificado a Moa. Más bien sacralizado. Pues seguramente que si entrase como anónimo colgaría buenos comentarios
EliminarPero qué coño dices de mitificado ni sacralizado, hostia. ¿De qué cojones hablas? Está claro que Oswald se refiere a De Elea cuando le responde a Sergio. ¿O estás tú más pedo que yo? Además que acabo de cenar de más y ya se me ha pasado al estómago.
EliminarMe voy a andar.
Está bien, rey, no te pongas así. No pensé que un error tan banal pudiera desencadenar tanta cólera.
EliminarNi rey, ni pollas. Eres tú el que has ido de listillo.
EliminarPero si yo sólo pensé que te referías a Moa. ¿Y por qué Moa no iba a comentar en tu blog?
EliminarLo cuelgo aquí, que lo dejé en el otro después del 'nuevo ovillo'
ResponderEliminarMuy interesante lo que dice de las diferencias entre tragedia, drama y comedia:
Massimo Cacciari, el filósofo alcalde de Venecia.
No es nada frecuente en estos tiempos que un político sea, a la vez, un gran pensador. Y que además tenga ideas transgresoras y originales para la ciudad cuyo destino le toca dirigir desde 1993. Massimo Cacciari, alcalde de Venecia, proviene de la izquierda marxista y obrera pero también de la filosofía, y es tan capaz de reflexionar sobre la tragedia o sobre Nietzsche como de promover una campaña para ahuyentar turistas de la ciudad en vez de atraerlos.
http://disenso.info/archivos/2201
¿Cómo discriminará entre turistas buenos y turistas malos?
EliminarOswald.
Fácil: si me tocas los cojones, fuera. Y si no, vamos a vérnoslos.
EliminarO así los discriminaría nuestro Federico.
Luis, justamente ha sido escribir eso aquí y actualizar la Burbuja y me acababa de contestar también.
ResponderEliminar¡El liberal Enrique de Diego se mete en la anti-"occidental" Soluciona!
ResponderEliminarPollo sin cabeza.
Oswald.
Ese partido es peor que una merienda de negros locos.
EliminarSupongo que hay que resignarse a que en España la "extrema derecha" sea una panda de tarados infiltrados por el CNI.
EliminarOswald.
Más o menos.
EliminarDe Diego también tenía un partido por el que se presentó al ayuntamiento de Madrid, el de las clases medias o algo así y hacía manifestaciones. Está como una cabra.
ResponderEliminarSí, es un juguete roto.
EliminarOswald.
Yo no me pierdo ni una "Ratonera"
EliminarFlipo.
Parece como si la dirigiera Wyoming.
Qué tropa.
Como dijo Groucho: "yo no entraría a formar parte de un club que permitiera la entrada de alguien como Enrique de Diego".
ResponderEliminarEso acabará mal. O el partido o de Diego. O los dos, que será lo más probable.
Eso es un circo.
EliminarMirad la presentación del partido en Madrid. Son cuarenta minutos, pero no tiene desperdicio.
Ni aposta.
Hablando de Rallo, ha muerto un anti-Rallo: Manuel Funes Robert ("lo importante no es el poder adquisitivo de las monedas sino el poder adquisitivo de las personas"). Descanse en paz.
ResponderEliminarOswald.
Me retiro. Hasta mañana.
ResponderEliminarOswald.